RAVENLOFT 5: ¡LA TRANSFORMACIÓN FINAL!

El clérigo de Barovia nos había confiado a Kavan, un aldeano joven que había sido mordido por el señor vampiro, el Conde Stradh. "Para salvar a este joven", explica el clérigo, "debéis entrar en el castillo y encontrar la fuente oscura. El agua en esa fuente puede revertir la maldición vampírica que fluye a través de la venas de Kavan, y tener cuidado con dejar que cualquiera de los monstruos de Stardh se acerquen a Kavan. Esta cerca de sucumbir a la maldición vampírica, y el mal del castillo podría hacer que… se perdiese. Tener cuidado".

¡PREPARADOS!

Como veis, en esta misión debíamos ayudar a un aldeano joven llamado Kavan. Stradh había visitado al aldeano en una de sus incursiones nocturnas y lo había mordido. El joven había comenzado el proceso de transformación en vampiro y la única forma de salvarlo era entrar en el Castillo Ravenloft.

¡LA MAZMORRA!

El objetivo de la misión era localizar una fuente mágica cuyas oscuras aguas podían revertir la magia de transformación. Debido a que los habitantes del castillo reconocían a Kavan como un igual ya que estaba en fase de transformación, los monstruos no le atacaban, no le afectaban los encuentros y podía moverse por la mazmorra a su antojo. Pero no todo era tan fácil, debíamos vigilar constantemente al aldeano ya que corríamos el peligro de que se viera atraído por el lado oscuro. Por eso, al comienzo de la fase de héroe debíamos encontrarnos adyacentes a Kavan para poder llevarlo controlado a través del dungeon y que no se quedara solo en ningun momento.

¡A POR ELLOS!

Pero el amigo no se controlaba y siempre que al comienzo de la fase de villano hubiera un monstruo en la casilla de Kavan, éste ¡se transformaba en vampiro! En ese momento debíamos sustituir la ficha icono de Kavan por la figura de Stradh y utilizar la referencia de vampiro joven. Era, entonces, un enemigo más que se activaba en la fase de villano y nos atacaba. En la siguiente fase de villanos debíamos comprobar si había un monstruo en su loseta, entonces seguía transformado en vampiro o volvía a su forma de aldeano si no se daba esa condición. Era evidente que siempre debía estar a la espalda de un héroe en la fase de exploración.

¡RODEADOS!

Al encontrar la Fuente Oscura, después de atizarnos con todo monstruo viviente, debíamos colocar en ella 5 fichas de golpe. Al final de cada fase de héroe debíamos colocar un monstruo a dos baldosas del héroe activo. Pero si al final de la fase de héroe Kavan estaba junto a un héroe en la loseta de Fuente Oscura, la fuente perdía un punto de vida. Si la fuente se quedaba sin vida ganábamos la partida y Kavan era liberado de la maldición.

¡QUÉ PINTA!

Llevar a Kavan por la mazmorra fue todo un desafío sobretodo al jugar la misión con los enanos. Debíamos tener en cuenta la condición de transformación en cada fase y en más de una ocasión Kavan se transformó en vampiro. Encima no podíamos matarlo ya que es nuestra misión protegerlo y salvarlo. El camino hasta la fuente oscura no fue un camino de rosas y al llegar allí la aparición constante de monstruos nos complico bastante misión. Nos quedamos a las puertas de perder ya que habíamos utilizado toda nuestra recuperación de salud.

Una aventura terrorífica que hemos disfrutado como bestias. Englobar este juego dentro de, como le diríamos,  juego de rol /aventura de terror gótico, es una autentica pasada ya que no sabía que se podía llegar a jugar a estos juegos con niños. Pero es que el sistema de juego de D&D lo hace posible, tan posible que son los propios enanos los que a veces me recuerdan que se ha de coger una carta de tesoro o una de encuentros.

LA FUENTE OSCURA Y EL ICONO DE KAVAN

Además ven la aventura como un juego aunque la temática sea monstruosa, quiero decir que se dejan llevar por la historia y cuando acabamos no piensan en la tensión ni el miedo sino en la bien que lo han pasado siendo un personaje y adentrándonos en un mundo ficticio. ¡Vamos que duermen por la noche como lirones! De hecho, hoy en día, da mucho más miedo un episodio de Hora de Aventuras que una partida al CASTLE RAVENLOFT. Los episodios en los que sale Marcelin, una horda de zombis o viajan al mismísimo infierno son de aúpa. 

No os recomiendo el juego con pequeños por el tema de superar ningún miedo, sino que lo recomiendo com puro divertimento. No tienen ningún trauma por jugar y además jugamos a muchas más cosas por lo que RAVENLOFT es un juego más que comparten y con el que tienen contacto con el ingles ya que, a veces, ellos mismos comentan cosas como"flip de card".

Como decía Lovecraft: "El más antiguo y poderoso sentimiento humano es el miedo y el tipo más antiguo y poderoso de miedo es el miedo a lo desconocido". 

¡SELFIE DE LA VICTORIA!

No tengáis miedo de jugar a Ravenloft con los pequeños, probadlo y lucharéis codo a codo formando equipo con unos seres poco estratégicos pero muy, muy ilusionados y la ilusión amiguetes, lo es todo.