¡Por fin estrenamos el DungeonQuest! ¿Qué decir del juego? De entrada yo necesito una partida más. No porqué el juego no me gustara sino porqué no lo disfruté al 100%. En principio el planteamiento es fácil entrar en una mazmorra, cueva, guarida del gran Dragón Kalladra y salir antes de que acabe el día con todo el tesoro que puedas.
La preparación fue lenta y los turnos se alargaron un poco, después todo fue más rápido y sencillo. Con una segunda partida iremos más a saco. Otro aspecto curioso es que la muerte te aguarda en cualquier pieza de mazmorra que coloques y detrás de cada carta puede haber mil trampas. Es un juego de riesgo, sino arriesgas puedes ganar pero no disfrutas del juego.
No me gustó entrar por esquinas diferentes, aunque parecía lo más lógico. Hubo poca interacción entre jugadores y se creó un tipo de partida que perfectamente se podría haber jugado en solitario. Si todos entramos en plan amigos traidores por la misma entrada seguro que se dan más situaciones de interacción donde nos podamos putear. Introducir el enfrentamiento entre jugadores en esas condiciones también sería ¡un puntazo!
Poco le faltó a Yoda para introducir la norma de batalla, ya sabéis como es, ¡cuantas más expansiones y reglas extras mejor!
¡Las losetas son unas cabronas! No te permiten una colocación libre sino que te indican la dirección en que tienen que ser orientadas. Esto puede acabar con algún jugador atrapado en una espiral de pasillos que no le llevan a ningún sitio.
El azar tiene un papel importante en el juego desde las losetas a las tiradas de dados para superar dificultades físicas de fuerza o agilidad (entre otras). En este aspecto se encuentra una de las dificultades del juego al avanzar, la tirada de dos dados no puede superar tu valor de agilidad o fuerza. Si tienes una agilidad de 6 es difícil superarla al tirar dos dados, es por eso que el juego tiene un mecanismo de ayuda: te regala un +1 cada vez que fracasas (puto juego empieza en plan asesino y luego te mima, ¡Jodido el jueguecito!
A nosotros no nos pasó pero estoy convencido que alguien con muy mala suerte podría acabar fuera de la partida en un primer o segundo turno. Para mí es un aspecto negativo ya que de entrada encontrarse con semejante situación es una putada.
En definitiva entretenido y rápido si entiendes la mecánica a la perfección. En nuestra partida Sergi y yo llegamos a la guarida del Dragón. Después de robar tesoros el Dragón despertó y a mí me fulminó. Sergi salió medio muerto pero era demasiado tarde para salir de la mazmorra. Núria que había quedado atrapada entre pasillos al ver que llegaba la noche dió marcha atrás y como había encontrado oro ganó sin demasiadas dificultades.
Después decidimos, entre bostezos (yo no me aguantaba), hacer un Vagos comparten piso. Pasamos un rato entretenido y desempolvamos este juego que al igual que el Muchkin te deja un buen sabor de boca. Gané inexplicablemente yo. Será porqué me he pasado el verano en la cama y tengo una práctica del copón.
El sábado fuimos con Ángel y Marta a la "Fira del llibre d'ocasió" que montan para las fiestas de la Merçé. Mientras paseábamos por los estands se nos ocurrió la idea de preguntar por un libro que no existe, su título "Hostias como panes", es una supuesta biografía de Bud Spencer. No nos atrevimos a preguntarlo pero nos echamos unas risas mientras tatareábamos la música de una de sus películas, creo que era la de "Y si no, nos enfadamos." Queda confirmado en el vídeo de abajo.
¡Vaya par de frikys! Para mí un momentazo, uno de esos que se repiten cuando pasamos una tarde juntos. ¡Qué pena que no sea más a menudo!
Ya veo que se han acabado las discusiones, seguro que Sergi no la lió más? :)
ResponderEliminarNo me mal interpretéis, pero aunque me gusta ver lo bien que os lo pasáis, me mola más ver piques. Tendremos que ver como evoluciona el Dungeons(parece entretenido, además que si lo suyo es arriesgar, con la poca cabeza que tengo seguro que muero antes de acabar), que ya veo que para variar, queréis modificarlo.
Pues nada seguid así!
¡Qué va! El tío se piensa que tiene razón, es como hablar con la pared. Suerte que cambiamos de juego y la cosa no profundizó más. Estábamos alcanzando limites dialectales inhóspitos. Mejor dejarlo así que sino ya me veo con un jaleo rollo ¡independencia (por lo largo del proceso)!
ResponderEliminarTú en este juego o te llevas una pasta o te pasa lo mismo que al del vídeo. Pero bueno sin riesgo no hay premio y si no, ¡Hostias como panes!