sábado, 20 de octubre de 2012

!ESPECIAL Nº 50! : ¡ME CAGO EN MARCO RUKOWSKI Y MARCEL SÜBELBECK ! (incluye poema)

Escribo estas palabras des del desánimo y pensando aún en lo que aconteció la pasada noche del viernes. Esa noche el azar estuvo presente en diversos fenómenos no lineales que marcaron el destino de una partida competida hasta el final. Mi respuesta a la hora de escribir esta entrada es totalmente emocional y no me pidáis que razone ya que la ira y la decepción se han convertido en frustración, una frustración totalmente justificada y que me sobrevino después de una explosión de adrenalina de la que mejor hablaré más adelante. No quiero dilatar más el relato, ni llorar por lo que ya no tiene solución, solo quiero que llegue diciembre y que allí, más allá del mar angosto, el legendario calvo vuelva para ¡poner las cosas en su sitio! 


Estaba bastante animado, Núria no podía tener una suerte infinita y todos sabíamos que su tiempo se estaba acabando. Sergi estaba un poco tocado, una mala semana, así que tenía que aprovechar la ocasión. El juego, Fresco. La noche, perfecta. La táctica, estudiada y meditada. Tenía claro lo que debía hacer, coger la iniciativa cargarme de colores durante las dos primeras rondas y mezclarlos como un loco en la tercera ronda. La jugada me salió redonda, conseguí tres losetas de valor muy alto y pude coger una buena ventaja en el camino de puntuación. 

Los otros dos (por primera vez en semanas) iban a remolque. Sergi totalmente desubicado no daba pie con bola y iba cometiendo pequeños errores que lo alejaban de la cabeza. Núria se mostraba lenta en ejecución pero detrás de su panel se estaba cociendo algo.

En mitad de la partida Núria hizo una jugada perfecta y restaurando tres piezas seguidas se puso en cabeza por primera vez. El último cuarto fue brutal, Núria se afianzo en la parte alta y fue intercambiando la primera posición conmigo. Sergi se montó una estrategia perfecta y a tres rondas del final juntó las filas y compartió liderazgo. Estábamos todos en un puño cuando llegó la última ronda. La ronda que decidiría quién se llevaría la gloría. 


Debíamos hacerlo perfecto para ganar ya que todos teníamos posibilidades. Sergi se levantó el primero y afianzo su primer turno. Yo no dudé y decidí jugar segundo. Una vez más Núria jugaba con ayudante y encima debía pagar muy poco en el mercado. 

Sergi empezó su jugada, tenía tres trabajadores en la catedral y uno en el taller. Era evidente que iba a rascar muchos puntos y que iba a hacer un encargo especial. Cuando acabó estaba en primer lugar.

Mi turno. Compré, restauré, hice un encargo especial y al final pude restaurar el altar. ¡Perfecto! Me coloqué en primera posición no a demasiada distancia de Sergi. ¡Tenía esperanzas! ¡Iba a ser un rival difícil! Sé que Núria era una rival de peso pero eso no iba a amedrentarme.



Núria jugó. Quedaban pocas losetas pero aún habían puntos en juego. Restauró dos de las piezas menores (4+7+el poder del ovispo), pintó un cuadro que le daba puntos pero ya estaba. ¡No podía hacer nada más! Contó sus puntos y se colocó detrás de mí.
¡Había ganado! ¡Por fin! ¡Ya era hora! ¡Soy el campeón! ¡Zas en toda la boca! ¡A la mierda la hegemonía! ¡La había fundido! ¡Toma derechazo!


Entonces va la amiga y dice:
-Perdona. ¿Las monedas se cambian por puntos verdad?

Mi cara se constriñó en un acto de aceptación de aquella pregunta. Tenía razón, no habíamos contado las monedas. Con un movimiento lento y preciso retiró su pantalla mostrando un buen puñado de ellas. Yo miré las mías y empecé a temblar. Sergi no llegaba pero ella empezó a sumar puntos uno detrás de otro y se puso en cabeza. Empecé a contar lentamente mis monedas y mi maestro acortó distancias hasta ponerse a la altura de Núria. ¡Empate! ¡Y una mierda! Marco y Marcel establecen en el reglamento que en caso de empate el jugador que llega el último elige ponerse delante o detrás del otro peón. ¡Joder! ¡Lo pongo delante! ¡Toma victoria! ¡He ganado de uno! ¡A que jode! ¡Soy invencible!


Os lo podéis imaginar corrí por todo el comedor, hice fotos del tablero, me jacté de forma provocadora y encima me tiré por el suelo como si hubiera marcado un golazo de chilena. Sergi me felicitó efusivamente y a Núria se la veía tocada. ¡Pues a aguantarse perdedora!

Entonces, mientras recogíamos el juego entre risas, va la amiga y comenta como muy concentrada:

- Perdona. ¿Yo era la última en jugar no?
- Sí por ?
- Pues porqué si yo era la última y movía mi maestro el último, en caso de empate soy yo la que decide poner el peón en primera posición. ¿No?

Sergi me miro durante unos segundos. Mi cuerpo absorbió toda la adrenalina para gastarla en otra ocasión y mi caparazón ya sin vida lúdica se desplomó sobre la silla. Mi mirada perdida, el desconcierto, chocar contra la realidad a esa velocidad me hizo pupita, una pupita hiriente que viniendo de Núria es como una hondonada de hostias a la velocidad de la luz. Encima esa sonrisa con una carga semántica tan brutal que sobran las palabras. Otra vez y otra y otra y otra  (y como diría Buzz) de ¡aquí hasta el infinito! ¡Me empieza a doler la espalda! Mi alma lúdica palideció ante tal desconcierto, una vez más, otra pírrica victoria, ¿cómo vencer tan devastadora fuerza de la naturaleza?

La crueldad del destino me hizo vivir de nuevo una lección que jamás olvidaré pero eso no puede evitar que me cague una vez más en Marco Rukowski y Marcel SüelBeck, los artífices del juego y de esa mierda de norma que, de nuevo, ha hundido en la miseria más absoluta las posibilidades de vencer a la ya declarada némesis oficial de las noches lúdicas. Tan respetada enemiga, tan antagónico personaje necesita un enemigo digno y por esos rezo a los Dioses. Rezo para que más allá del mar angosto, en una de las islas mediterráneas, el calvo este preparándose porqué él es ¡nuestra única esperanza! 


¡NUESTRA ÚNICA ESPERANZA!

Como surgido de un oscuro agujero
y nacido de la esperanza
soy aquel que trae venganza
y venceré sobre el tablero.

Soy un soldado sin armas
y un solo dado es mi consuelo.
No más derrotas amigos,
ninguna frustración compañeros.

Cuando todo esté perdido
y sea imposible vencer
llamadme desde el silencio
y a vuestro lado lucharé.

Soy vuestra última esperanza
soy el calvo vencedor
soy el guía hacia la victoria
soy la lúdica revolución.

Desde que os abandoné
ya nadie por vosotros vela
pero pronto volveré
¡Qué se prepare ella!

Cambiaremos el destino
conocemos la manera
ningún juego será duro
¡Venceremos contra ella!

Hasta la más dura piedra (7 Wonders, Fresco, Cyclades)
se deshará en nuestras manos
ya nadie más os atemorizará
¡Pronto estaré aquí, hermanos!

Soy vuestra última esperanza
soy el calvo vencedor
soy el guía hacia la victoria
soy la lúdica revolución.

Y por lo qué podáis pensar,
el secreto de mi fuerza no se encuentra en mi melena
es mucho más simple amigotes
chocolatinas, regalices, espirales y palotes.

Diciembre es el momento,
surcando las aguas llegaré,
en tú nuca notarás mi aliento.
¡Nunca podrás vencer!


Dedicado a Núria (¡Te quedan dos telediarios! ¡Qué lo sepas!)


PRÓXIMAMENTE NÚMERO ESPECIAL: ¡LA GRAN ESPERANZA CALVA! 

6 comentarios:

  1. jajajaja, iba a escribir porque ya había leído la entrada, pero cuando he visto el poema he flipado. Pero por supuesto, que ya os podéis ir preparando, olvidaos de dietas que os nublan la mente, eso del agua es para las ranas y los peces, la dieta ideal, recordadlo siempre, son conguitos con palomitas(acordaros que las palomitas se ha de dejar enfriar que si no es una guarrada! pero no deja de estar bueno!), y eso acompañado con una buena cocacolilla, o nestea, o lo que sea. Esos frutos secos, esos picapicas, y ese chocolate en sus múltpiles variantes, ya sean galletas, en tableta o acompañadas!

    Ahí reside vuestro gran error, Núria tiene una debilidad y son esos pica pica entre, y durante juegos. Os habéis dejado engañar por sus triquiñuelas, que si dieta sana, que si nos tenemos que adelgazar, ... Falso! Ella es consciente de que si hay algo que picar en la mesa se despista, y por eso lo ha eliminado de las sessiones.
    Volved a los dulces hijos míos, y la victoria volverá de nuestra parte!

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  2. Gran maestro, tus palabras son el camino hacia la victoria. Si el pica-pica es la solución, ¡hágase pues, el pica-pica!
    Igualmente lucero del alba, esperamos que le des una lección por la múltiples ofensas que hemos recibido de forma continuada estos últimos meses.
    Nuestra amiga necesita que alguien le baje los humos y no hay nadie mejor, eminencia, que usted para llevar a cabo tan ardua tarea. ¡Estamos contigo!

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  3. Cada vez te luces mas Julito.
    Propongo para el proximo dia uno colaborativo. Asi ,o ganamos todos o perdemos todos.

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  4. Engellme ha dicho una verdad, pero esa es la solución de los cobardes! jajaja
    La colaboración la podéis hacer en un juego no colaborativo, e ir a por ella! xd
    Eso también es de cobardes, pero bien hecho al igual no se entera! jajaja
    Os podéis ir turnando las victorias y todo para disimular. Eso sí, si ni aún así la ganáis no soltéis prenda al respecto o la vergüenza será máxima!.
    Sigo diciendo que lo mejor és optar por el picapica, que siempre le despista!

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  5. Gran maestro no escuches sus palabras vacías de valor. El gran Yoda tiembla y con él la dignidad de todos los guerreros lúdicos. ¿Cómo podemos jugar a un juego cooperativo en medio de un conflicto bélico de primer nivel? Octubre de 2012 será conocido como la 1ª Guerra Mundial Lúdica. Hemos perdido todas las batallas pero no la guerra. Esperamos que los aliados, al otro lado del mar angosto, lleguen y nos den esa ventaja que tanto necesitamos. ¡Mientras resistiremos, nos atrincharemos como valientes rebeldes dispuestos a aguantar lo que haga falta!
    Yoda si estas falto de inspiración lee el 300 de Frank Miller. Ellos lo hicieron, no sucunbieron ante los Persas por eso hermano únete a nuestro grito de batalla y que los infiernos tiemblen porqué este viernes alguien va a salir con los pies por delante.
    -¡AU!¡AU!¡AU!

    Yoda el viernes desayuna bien porqué por la noche ¡cenaremos en el infierno!

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  6. Dios... Ahora si que me motivado!!!!!!!
    Estoy listo y he desayunado bien (comido y merendado).
    Voy pa lla. Postergaremos el "Gears of War".
    Por cierto pregunta mi padre si estare para desayunar. Lo digo por si el viaje de vuelta del infierno es muy largo.

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