Una vez más los monstruos iban a incordiar en el cumpleaños de mis gemelos. Esta vez todo seria más sofisticado. Los monstruos sabían que cumplían 10 años y habían preparado una propuesta muy compleja. El día empezó como siempre, mis hijos se levantaron a recoger sus regalos y entonces... ¡Se mascó la tragedia! ¡No había regalos! Pero los monstruos son muy apañadetes y dejaron una nota y un poco de desorden.
De momento teníamos peluches de roedores donde no tocaba y una cajita de madera un tanto sospechosa. Al abrir la caja encontraron un mensaje encriptado. El nivel de los monstruos era brutal, se habían adaptado a las capacidades de unos detectives que cada año son mejores. Veamos la prueba.
Al abrir la caja encontraron algunos mensajes, lo que parecía el símbolo de una calavera (¿huellas?), un candado de combinación que contenía algo dentro y un mensaje escrito totalmente ininteligible y una plantilla de cuadros con espacios recortados.
Las pistas que debían tener en cuenta eran tres puntos de colores que te permitían colocar la plantilla en su posición inicial y un símbolo de girar hacia la derecha para mover la plantilla en la dirección correcta.
El mensaje que encontraron fue el siguiente: POMA DALE AL PLAY. Después de un par de minutos dándole vueltas entendieron que poma se refería al ordenador (iMac) y dale al play a activar un reproductor. Se dirigieron entonces al ordenador y al abrir la pantalla encontraron un vídeo preparado. Era un vídeo de la AGENCIA DE DETECTIVES DE MONSTRUOS en el que se les felicitaba y se les aseguraba que habían reforzado el perímetro de casa para que los regalos estuvieran a salvo. Pero el vídeo no acababa ahí:
El vídeo que habéis visto encerraba la siguiente prueba. En la última imagen se les advertía que observaran y entonces aparecía un objeto (paraguas)que poco tenía que ver con los mensajes que acompañaban. El paraguas era la pista para la siguiente ubicación. No tardaron en vislumbrar que el paragüero de la entrada podía ser la pista. Además en el vídeo, un personaje de la agencia les daba una pista brutal (la huella) del monstruo que se había llevado los regalos. ¡Identificar al monstruo era la prioridad! Rápidamente cogieron el libro de PEQUEÑOS DETECTIVES DE MONSTRUOS e identificaron al culpable. Las huellas, los peluches desordenados y que al monstruo le gustaran los secretos, fueron las pistas necesarias para esclarecer quien era el culpable.
A continuación debían dirigirse al paragüero y llevar con ellos el candado que de momento no sabían abrir. En el paragüero encontraron un código QR que se dispusieron rápidamente a investigar. Consiguieron un móvil y fueron a parar a una página hermana ¡de este blog!
El código QR los llevaba a este enlace: https://mundillofriky2juegosdeinteres.blogspot.com/2019/07/aneu-la-biblioteca.html
Y esto es lo que podían ver:
¡Desde la agencia nos querían ayudar! El paraguas también era una pista de ellos. No estaban solos en la investigación y debían continuar con este juego de deducción. ¿Qué prueba les esperaba en la biblioteca?
Después de una búsqueda ardua, encontraron una bolsa que contenía un material, una vez más, difícil de entender. Una especie de entrada de teatro con un mensaje escrito en el idioma de los monstruos. La clave estaba en la siguiente pista: MONSTRES=ORPUWUHV. Debían descubrir la relación que había entre las letras para encontrar el siguiente mensaje: ANEU A L'HABITACIÓ.
CÓDIGO DEL CÉSAR |
Con el enigma resuelto se dirigieron a su habitación. Recordad que aún llevaban un candado encima del que hablaremos más tarde. En el caballete de dibujo encontraron un sobre con un mensaje de colores muy extraño y una gafas para ver en tres dimensiones (de las de antes, sin tecnología punta).
Utilizaron las gafas una y otra vez pero el mensaje no aparecía. Entonces, al cerrar un ojo y ver sólo por uno de los filtros de color, pudieron leer lo que decía: LA SIGUIENTE PISTA ESTÁ EN LA COCINA. El monstruo de los Secretos estaba jugando duro pero no nos íbamos a rendir.
Allí les aguardaba un mensaje y un código para descubrirlo. Se aplicaron un rato y pudieron resolverlo, debían buscar en la habitación de su hermana mayor. La búsqueda continuaba y no sabíamos aún para que servia el candado.
La siguiente prueba era un papel con marcas de doblaje y con lo que parecía partes de diferentes números.
También había una nota que ocultaba un mensaje en diferentes colores y perspectivas, decía que debían encontrar la llave del trastero.
Además había un collar con piezas de colores. Mirando el collar, entendieron que debían doblar el papel siguiendo el orden de los colores del collar. Doblaron en el orden de correcto y cada vez que aparecía un número lo introducían en la combinación del candado. Así consiguieron una llave que debía de ser la del trastero.
Pues nada, nos dirigimos al trastero en pijama y la llave nos dio acceso al gran tesoro.
Pero encontramos una nota más. Parece ser que al resolver todas la pistas y pruebas se nos proponía una ubicación. Aquella misma tarde debíamos dirigirnos a una ubicación concreta. La misión no había acabado.
Aún debíamos capturar al monstruo. Nos dirigimos al comedor de casa donde habría el enfrentamiento final. Los niños habían leído que si comparaban las manchas del monstruo de los secretos con las del monstruo de las macetas, éste se podía enfadar mucho. Así que lo hicieron a riesgo de que pudiera revelar uno de sus secretos más ocultos.
Empezaron a decirle en voz alta que sus manchas se parecían al del monstruo de las macetas y entonces ocurrió. El monstruo grito un secreto y huyó.
Ante tal secreto, los investigadores buscaron venganza mientras el monstruo de los secretos huía por la ventana. Esta vez los detectives no consiguieron capturar al monstruo pero lo intentaron y superaron cada una de las pruebas con ilusión. ¡No siempre se puede ganar!
PD: ¿Recordáis el mensaje con la ubicación que habían encontrado en el trastero? La ubicación era la de una actividad de ESCAPE ROOM ambientada en el universo de Harry Potter. Así acabamos el día, buscando ¡la piedra filosofal!
No hay comentarios:
Publicar un comentario