Hemos vuelto de Granollers con sensaciones contradictorias. De entrada hemos hecho el viaje con la ilusión de hacer algo diferente y pasar un buen rato lúdico. Pero por otro lado no hemos podido jugar a todo lo que hemos querido. Pensaréis que los juegos estaban ocupados o que no había mesas libres. ¡Pues no! La verdad es que no había nadie que nos los pudiera explicar. La buena gente de Ayudar Jugando no ha podido atendernos en este aspecto concreto y juegos que tenían en la estantería no han podido ver mesa. Pero hemos descubierto otros juegos, más sencillos, pero interesantes y curiosos.
Empezaré comentando a lo que hoy hemos jugado, sobretodo, Sergi y yo, ya que Núria ha estado más pendiente de los pequeños en el stand de LEGO.
La compensaremos dejándonos ganar de nuevo al SEASONS.
Iremos por partes explicando la experiencia a nivel de juegos.
La compensaremos dejándonos ganar de nuevo al SEASONS.
Iremos por partes explicando la experiencia a nivel de juegos.
Desde el comienzo del tiempo, el Dragón y el Fénix han vigilado y guiado los intrincados senderos de la vida, manteniendo el delicado balance entre las fuerzas gemelas de la elección y el destino. Estos dos poderosos seres comparten la noble tarea de custodiar los numerosos caminos que llevan a la sabiduría divina.
Un juego interesante de hasta 8 jugadores. Un tablero con diferentes entradas a su alrededor. Colocas el peón en una de esas entradas y a partir de aquí comienza la guerra. Debes poner losetas ante tu peón y moverlo sobre el sendero escogido hasta un extremo de la loseta. Cada loseta presenta diferentes senderos que llevan a destinos diferentes y intrincados.
Todos los jugadores deben hacer lo mismo y avanzar. El objetivo del juego es echar del tablero a los demás peones. Puede que los caminos los lleven al exterior o puede que choquen entre si y se eliminen mutuamente varios jugadores.
Basicamente, como diría Christopher Lambert en los Immortales, "¡Sólo puede quedar uno!"
Por cierto mientras jugábamos una abuelita le ha entrado a Chechi y va el cabrón y no le hace ni caso. !Un poco de sensibilidad Chechi!
Por cierto mientras jugábamos una abuelita le ha entrado a Chechi y va el cabrón y no le hace ni caso. !Un poco de sensibilidad Chechi!
Lidera a un Gremio de comerciantes, invierte en minas, envía naves al nuevo mundo y recluta a los mejores artesanos. Crea un imperio comercial y recibe las visitas de los ilustrados nobles, mecenas con infinitos recursos para que puedas adquirir prestigio y gloria.
¡Qué delícia de juego! Sencillo, entretenido y hemos jugado con Mar. Todo consiste en coger joyas para comprar cartas que puntúen. Las cartas tienen un símbolo de joya y sirven como si lo fueran. Además tener diferentes cartas te da la posibilidad de conseguir el favor de algún noble. Cuando alguien llega a 15 puntos el juego se acaba pero se termina la ronda, quien tenga más puntos gana. Lo mejor del juego son las fichas de joyas, ¡qué fichas!
Calidad brutal, parecen fichas de casino ¡de Montecarlo! El tacto, el peso, todo por tener esas fichitas en las manos. A esto se le llama placer lúdico.
Calidad brutal, parecen fichas de casino ¡de Montecarlo! El tacto, el peso, todo por tener esas fichitas en las manos. A esto se le llama placer lúdico.
ATON
Otro juego que me ha gustado mucho. Ambientado en el antiguo Egipto y para dos jugadores. La verdad es que he quedado prendado con una mecánica simple pero efectiva que requiere de cierta atención ya que has de estar pendiente de muchos aspectos. Cada jugador elige una dinastía (unas cartas rojas o azules numeradas del 1 al 4). Hay un tablero y cada jugador se pone a un lado.
En el tablero, hay 4 templos. Los templos son la clave del juego. Es Aton, gana quien más puntos consiga. Para conseguir puntos, hay que conseguir mayorías. Para conseguirlas, hay que jugar las cartas apropiadas en el lugar apropiado y colocar las fichas en los espacios apropiados y en los tiempos apropiados. Parece fácil pero no lo es, además alguna acción te permite quitar fichas de tu adversario y putear un poquitín. Altamente recomendado.
En el tablero, hay 4 templos. Los templos son la clave del juego. Es Aton, gana quien más puntos consiga. Para conseguir puntos, hay que conseguir mayorías. Para conseguirlas, hay que jugar las cartas apropiadas en el lugar apropiado y colocar las fichas en los espacios apropiados y en los tiempos apropiados. Parece fácil pero no lo es, además alguna acción te permite quitar fichas de tu adversario y putear un poquitín. Altamente recomendado.
LA FALLERA CALAVERA
Un juego muy divertido, por mecánica y ilustración. Es un juego valenciano que se ha autofinanciado a través de internet. El argumento es un poco loco pero funciona bastante bien. A causa de una "mascletá" una fallera muere por culpa de un error en la seguridad del acto. La fallare vuelve a la vida convertida en zombi y sólo hay una manera de calmarla. Todos los personajes típicos de las fiestas valencianas deben cocinar una paella pero no una paella cualquiera, ha de ser una paella con cinco ingredientes que salvaran al mundo. El muslo de pollo, un conejo o un simple tomate. pueden salvar al mundo de la ira de la fallara calavera.
Es un juego de cartas donde debes enfrentar diferentes personajes para ser el primero en hacer la paella. Hay cartas de personaje, de ingredientes, de refuerzo, de puteo... Una especie de Muchkin pero a la valenciana. Ágil, rápido y divertido. Además ha molado ayudar a gente con ideas y ganas de crear cosas chulas! Se me olvidada, todas las cartas contienen frases típicas de valencia o referencias a su cultura.
Hemos jugado con el autor y un colega suyo i sabéis qué, va Chechi y les mete una paliza. ¡Joder! ¡Es que ya no respetas nada! Chechi le compra el juego y le pide una dedicatoria, y el tipo (Enric Aguilar) ruborizado porque no es famoso como otros zarrapastrosos, le escribe:
LE HAVRE
MUNDODISCO
Un juego muy divertido, por mecánica y ilustración. Es un juego valenciano que se ha autofinanciado a través de internet. El argumento es un poco loco pero funciona bastante bien. A causa de una "mascletá" una fallera muere por culpa de un error en la seguridad del acto. La fallare vuelve a la vida convertida en zombi y sólo hay una manera de calmarla. Todos los personajes típicos de las fiestas valencianas deben cocinar una paella pero no una paella cualquiera, ha de ser una paella con cinco ingredientes que salvaran al mundo. El muslo de pollo, un conejo o un simple tomate. pueden salvar al mundo de la ira de la fallara calavera.
Es un juego de cartas donde debes enfrentar diferentes personajes para ser el primero en hacer la paella. Hay cartas de personaje, de ingredientes, de refuerzo, de puteo... Una especie de Muchkin pero a la valenciana. Ágil, rápido y divertido. Además ha molado ayudar a gente con ideas y ganas de crear cosas chulas! Se me olvidada, todas las cartas contienen frases típicas de valencia o referencias a su cultura.
Hemos jugado con el autor y un colega suyo i sabéis qué, va Chechi y les mete una paliza. ¡Joder! ¡Es que ya no respetas nada! Chechi le compra el juego y le pide una dedicatoria, y el tipo (Enric Aguilar) ruborizado porque no es famoso como otros zarrapastrosos, le escribe:
LE HAVRE
En "Le Havre: El puerto fluvial" cada jugador tiene su propio puerto fluvial (echándole imaginación, mucha imaginación), y para esto los jugadores deben construir edificios que no tengo ni pajolera idea de para qué sirven. Hay unos materiales y monedas pero a mi el objetivo no me ha quedado claro. Me he perdido la hostia y la gestión de los tableros ha sido pesadillesca.
Los materiales confusos, pequeños y los tablero insípidos. El desarrollo del juego es bastante peñazo, se juegan doce rondas, en cada una de las cuales los jugadores se turnan para realizar acciones. Esto es otra cosa, no hay indicador del paso de las acciones y a veces es un poco lío contabilizarlas.
El que nos ha explicado el juego se había liado con la abuela que le había tirado los trastos a Chechi y como venganza el tipo nos ha colocado ese truño que no era más que un juego de compra compulsiva. De pescadores nada de nada. ¡Joder dibujad una caña! o ¡Unos personajillos vestidos de marineros!
MUNDODISCO
La serie de novelas de Terry Pratchet tiene muchos seguidores y como no el tema se trasladó al mundo lúdico. El juego plantea la guerra por el control de los barrios de la ciudad. Cada personaje y sus esbirros deben ganar con un objetivo diferente y oculto. Los demás no pueden saber cual es éste porque sino evitaran a toda costa que lo consigas. Utilizar cartas para mover peones, matarlos, construir edificios, ganar monedas... y todo esto para ganar sin saber que deben hacer los demás.
El juego me ha parecido sencillo, corto y jugable. Con Mar funciona seguro, apto para no jugones y gente que no quiera exprimirse demasiado la sesera.
Hoy hemos aprendido a jugar a todo esto, que no es poco. Además, y como prometimos en la entrada del año pasado, hemos contribuido económicamente con la gente de Ayudar jugando. Espero que puedan hacer una gran labor.
Por cierto Chechi, esta entrada pertenece a ¡¡¡Mayo!!! ¡¡¡Objetivo conseguido!!!