jueves, 22 de diciembre de 2011

Un traidor entre nosotros o ¡Judas en la retaguardia!‏

Limpiamos la mesa, recogimos los platos y dejamos hueco porque la batalla entre humanos y Locust se trasladó al comedor con el juego de mesa de Gears of War. Su creador Corey Konieczka, creador de otras adaptaciones a juegos de mesa como Battlestar Galactica: The Board Game o Las mansiones
de la locura.

La noche prometía, ya habíamos probado el Galactica con muy buenas sensaciones, ahora le tocaba el turno al Gears of War, una apuesta de Sergi.
¡Madre mía! La mesa estaba limpia y Sergi se acerca con la bolsa y el juego. Saca una tela de camuflaje, de esas para cazar patos, y la coloca sobre la mesa. ¡La mesa camuflada! A continuación saca unos altavoces de ordenador y prepara la banda sonora del juego de xbox escrita por Steve
Jablonsky. ¡Este es un friky de los míos! Después saca una barra de pintura para camuflarnos.




¡Vaya puntazo! ¡Así me gusta, motivación y actitud! (que pena que nadie se camuflara).

Empieza la preparación del juego. Todo sigue su curso natural, Sergi explicando por encima algo que solo entiende él pero que los demás sabemos que en la primera ronda asimilaremos. Las miniaturas increíbles, las normas asequibles y la concentración a tope.

Empieza la partida. El mapa esta montado, turno de miembro de equipo y después venga a poner monstruos. ¡Ferran feliz, venga monstruos y monstruos!
 Pero… ¡Vaya monstruos mariquitas! Nos duraban menos que un caramelo en un colegio. ¡Vaya armas! Uno que desmiembra, venga granadas, pistolones con sierras… ¡Vamos los Locust eran cerdos en un matadero!

- ¡Esta partida es muy fácil!-comentaba Sergi decepcionado.

- Hay pocos monstruos- se quejaba Nando con las manos llenas de armas y con ganas de disparar
a cualquier cosa que respirara.

Teníamos alguna dificultad pero la verdad es que cooperábamos e íbamos superando las adversidades que surgían.  Ferran tapaba los agujeros e impedía el paso a lo monstruos (Infames, droids y los temibles boomers), Núria emboscaba y daba estopa a diestro y siniestro, Sergi utilizaba su arma de largo alcance y mantenía a raya a la Hordas y yo con mi arma de corto alcance frenaba el avance del algunos Locust.

Todo iba bien.
 Llegamos al final del mapa y en un enfrentamiento épico, con heridos y cagadas estratégicas, nos acercamos a la puerta de salida. ¡Hemos ganado! ¡No era tan difícil!

 - Bien, ahora activaremos la segunda parte..-dice Sergi hablando solo.
 - ¿Qué segunda parte?-pensé yo.
 - Sí cuando llegamos a la puerta se activa la fase final.
 - ¡Qué cojones de fase final! ¡Podías haber avisado! ¡Este tío es gilipollas!

 La peña sin munición, yo herido por imbécil ( ¡Sí tirad la granada que yo no me muero!) y Sergi sospechosamente en la retaguardia. Aparecen en escena 3 infames, 3 droids y 3 boomers! ¡A la mierda!

¡Estamos muertos!

Nando sonrie. Por fin un desafío a su medida. Se le saltaban las lágrimas de felicidad y los demás acojonados!  Estoy convencido que si Chuck Norris lo conociera lo adoptaría! Es su recambio natural.
Resumiendo nos jodieron bien pero bien. Nos dieron para el pelo. Nos crujieron. Nos rompieron el cacas.
Y todo por culpa de un traidor, alguien que cuando explica las normas obvia aspectos tan importantes como que detrás de la puerta hay una convención Locust dispuesta a darnos la bienvenida!


Gracias puto Sergi!

PD: Suerte que no salió el Berseker!!!




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