sábado, 24 de septiembre de 2016

¡CTHULHU WARS O LA MALDITA MEZQUINDAD!

¿Qué haces con 8 kilos de plástico dentro de una caja? Muchos de vosotros haríais botellas, vasos y con una impresora 3D hasta alguna que otra figura. Nosotros con 8 kilos de plástico jugamos a CTHULHU WARS, porque eso es lo que hay dentro de la caja... 8 kilos de figuras preparadas para enfrentarse entre ellas y luchar por el dominio del planeta Tierra. Los humanos ya no tenemos voz en este enfrentamiento y son las diferentes facciones de dioses primigenios las que deciden por nosotros. ¿Qué le vamos ha hacer? ¡Se veía venir!


Yo no voy ha hablaros de como se juega, deciros simplemente que la idea es la del enfrentamiento por un territorio. Mover tus unidades con diferentes poderes, atacar, controlar portales, invocar criaturas, llenar tu grimorio… Básicamente en un juego estratégico de hostias como panes y sorpresas mayúsculas ya que tus adversarios utilizaran sus invocaciones y sus grimorios de hechizos para dar la vuelta a cualquiera ataque o aprovecharse de la situación. Y es aquí amiguetes donde CTHULHU WARS gana enteros.

¡LOS TRES DIOSES!
Cada una de las facciones tiene sus propios hechizos, sus propias  habilidades, sus puntos fuertes y sus puntos débiles. Ninguna de las cuatro facciones se asemeja y por lo tanto debes jugar o adaptarte a jugar de una manera determinada en función de esa facción. En esta asimetría está la gracia del juego, plantea tu estrategia en función de lo que tienes ante ti, no te pongas peleón si no puedes y no te pongas a invocar como un loco si tu fuerza está en expandirte.

¡HA DARNOS TOÑAS!
A todo esto es indispensable comentar que al menos le tienes que dar 4 partidas para probar como funcionan cada una de las facciones. Eso le da cierta rejugabilidad y la verdad es que el juego es sencillo y puede ver mesa si el tema interesa. Es importante comprobar si realmente hay mucha descompensación entre facciones o si, por contra, tienes oportunidades de llevarte el gato al agua utilizando tus habilidades correctamente.

¡ORGULLOSO DE SU HASTUR!
El juego está sobreproducido pero ese es su encanto ¿quien quiere un CTHULHU WARS con figuras normales? ¡Nadie! El producto ha sido creado en este formato gigante y ese es el formato que ha de tener. Coger las figuras, olerlas, acariciarlas despacio pasando los dedos por cada detalle, sentir el plástico deslizandose… ¡La verdad es que es una gozada! El juego es caro de cojones y la culpa la tienen esas encantadoras figuras que descansan en una caja de cartón a prueba de balas. Mención especial a los dados que compró Sergi y que le dan un toque a los combates.

¡UN TOQUE DE CALIDAD!
Si tienes la suerte de tenerlo te darás cuenta que no es un juegazo, es un juego entretenido y mucho. Te darás cuenta que no cabe en la estantería pero si aprietas con fuerza entra. Te darás cuenta que cuando lo enseñas los ojos brillan y la bocas babean. Cuando lo tengas en brazos lo acunarás sin pensar que simplemente un juego. Te darás cuenta que es tuyo y lo querrás, aunque alguna de sus facciones no haya conseguido darte la partida, lo querrás porqué ya es parte de la família.

¡INVASIÓN!
Nuestra primera partida fue larga pero no complicada. Teníamos traducciones de todo el material y fuimos jugando sin problemas. Después de la segunda ronda ya sabías como funcionaba pero costaba más saber como debías utilizar tu facción.

¡LAS TROPAS DE NYARLATHOTEP!
De esta primera partida quiero rescatar una situación incomoda que aún me tiene bastante indignado. Nuestro "amigo" Chechi explicó el juego con sus típicos desvaríos de ahora voy ahora vengo y por el camino no me entretengo. Núria medio mareada por el vino y con cara de "¿CTHULHU que?" esperaba el inicio de la guerra.  Bueno, el tipo explica las condiciones de victoria: ganar 30 puntos o más y llenar el grimorio de hechizos o algo así sonó en esos primeros compases. Después de eso miró el reglamento del derecho y del revés, tradujimos e interpretamos, le sacamos el polvo a las miniaturas…En el transcurso del juego mi facción se adelantó en el dominio de portales y me distancié en bastantes puntos. Mi Dios primigenio Nyarlathotep era bueno en combate y sus huestes se defendían como leones. El amiguete fue a remolque aunque, como ya sabéis, si le dais dos turnos más te busca la ruina. En el último turno a punto de hacer los 30 puntos y con un margen bastante bueno, el tipo no me avisa, de forma amable y tutorial, de que me falta un conjuro y lo que voy ha hacer es darle la partida. Se lo mira desde la distancia, sonríe, sabe de mi error y lo permite. ¡Qué sí! ¡Culpa mía por no estar atento! Pues de acuerdo, merezco la derrota pero la acción del amiguete es antitutorial y por supuesto mezquina.

¡NÚRIA KO!
La mezquindad es un defecto de nuestro amiguete Chechi. Hay muchas formas de ser mezquino y él no lo es en lo que se refiere a ser generoso lo es en el hecho que algunas de sus acciones denotan mezquindad. Esa mezquindad que lo beneficia en su favor, dejando atrás el compromiso que se asume al explicar un juego. Ese compromiso tiene que ver con acompañar a los nuevos, tutorizar esa partida para que comprendan sus entresijos y no cometan errores de mecánicas u orden de turnos. Un acompañamiento para poder ir recordando las condiciones de victoria tan importantes en un juego.

No se trata de ser exagerado, solo quiero decir que cuando uno se prepara un juego y lo expone por primera vez ha de tender a ser generoso y entregarse para que ese juego impacte de forma positiva. Por eso me quejo de lo poco que recibí y por eso mismo me fijé en lo poco que me dio Chechi. Yo que tiendo siempre a la derrota vislumbre ayer un rayo de esperanza que me fue arrebatado en el último suspiro. Con las manos alzadas la noticia llego a mis oídos, había perdido por no conjurar un hechizo y el tipo con menos puntos que yo pero con el grimorio lleno se llevó la partida. Le dieron igual mis sentimientos, jugó conmigo como una gato juega con el ratón antes de darle muerte.

¡VICTORIA DE MR. MEZQUINO!
Estoy algo decepcionado con mi amiguete y ahora sí me dirijo a él directamente. ¡Te felicito! Cada día me importas menos. Me gustabas más…cuando no me gustabas. Se escribe "Creí en ti" y se pronuncia "Me decepcionaste".  Ayer estuve tentado de aplaudirte, de levantarme de forma solemne y dedicarte una ovación de esas largas, de esas esperando un bis. Como queriendo que repitieras ese final agónico, ese momento tan placentero para ti y tan decepcionante para mi. Solo para que vieras o entendieras con mi gesto el sarcasmo con el que te estaba tratando mientras abrazabas a tu Dios Hastur. Espero que disfrutaras de tu primera partida y victoria a tu CTHULHU WARS. ¡La próxima vez intentaré estar a la altura de tu mezquindad!

1 comentario:

  1. Jajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajajaja

    Sí! todo un ejemplo de cómo encajar una derrota en modo "tutorial".
    Pero esperemos que te haya enseñado algo y no te vuelva a pasar prque las risas se duplicarán.

    Pasemos a otro tema, parece que el juego está bastante bien, y por lo que dices, más que jugable. Algún dia volveré con tiempo para juegos.ganas no me faltan

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